Primer Summit de Servicios Ecosistémicos

Llegamos con una promesa: “Conservar para Impactar”. Durante tres días inolvidables en la 1ª Cumbre de Servicios Ecosistémicos de FSC en América Latina, esa promesa se convirtió en algo real.

En el Día 1, nos reunimos para comprender que la certificación FSC no es solo una etiqueta, sino un puente entre la gestión forestal sostenible, la acción climática y la biodiversidad. Descubrimos que FSC ha completado 96 proyectos de impacto verificado en 25 países, lo que significa que 3,5 millones de hectáreas ya han sido protegidas bajo estos proyectos, y —lo más relevante— la mitad de esos impactos verificados proviene de América Latina.

Dia  1

Durante la capacitación en Servicios Ecosistémicos (ES Pro Training), junto a Ondřej Tarabus (Asesor Senior en Servicios Ecosistémicos de FSC), César Galarza (Líder Regional de Servicios Ecosistémicos, América Latina) y la Red de Socios de FSC en la región, las conversaciones se profundizaron y la visión se volvió más clara.

El Día 2 nos llevó al terreno, al Fundo Idahue (Viña Concha y Toro). Entre viñedos y bosque nativo, fuimos testigos de un ejemplo vivo de armonía: por cada hectárea productiva, casi media hectárea corresponde a bosque esclerófilo certificado FSC, vibrante de biodiversidad. Además, Concha y Toro ha logrado Impacto Verificado FSC (en captura y almacenamiento de carbono), como parte de su esfuerzo por reforzar prácticas regenerativas alineadas a sus metas de sostenibilidad.

Dia 2

Presenciamos el poder de las personas al unirse. MELT (Museo Escolar Laguna Taguatagua), un museo in situ ubicado en el corazón del viñedo, encarna la convicción de que el territorio y el patrimonio pertenecen a las comunidades. Explicaron que, hacia el final de la Edad de Hielo en Chile, la zona donde hoy se encuentra Viña Concha y Toro fue hogar de megafauna.

Como confirmó Pablo Lagos, Ingeniero en Sostenibilidad (C y T):

“La conservación, la sostenibilidad y la protección del bosque nativo son posibles para Concha y Toro bajo los estándares FSC y gracias a la cooperación con CONANP (Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas).”

Esta experiencia mostró cómo el sector privado, la certificación FSC y las instituciones locales y académicas pueden no solo proteger el bosque, sino también revalorizar el patrimonio cultural del territorio.

🌿 Bosque nativo junto a los viñedos de Concha y Toro

En el Día 3, la Cumbre fue el espacio donde las historias se transformaron en compromisos. Desde presentaciones sobre impactos locales hasta paneles sobre cómo escalar proyectos, el día destacó una verdad esencial: las buenas intenciones no bastan; se necesitan métricas sólidas y financiamiento para hacerlas viables.

Líderes comunitarios y del sector privado coincidieron en que la intención debe ir acompañada de acción. Como señaló Subhra Bhattacharjee, Directora General de FSC:

“El momento es urgente. Es hora de que el sector privado dé un paso adelante. Todos sabemos que los gobiernos están haciendo lo mejor que pueden, pero no es suficiente.”

Por su parte, María Luisa Soto, representante del ejido Topia, añadió:

“El bosque no se ha quemado; se han generado empleos; hemos logrado impacto social, económico y ambiental a través de los servicios ecosistémicos, gracias a FSC.”

La Cumbre nos ofreció espacios donde los datos duros se encontraron con testimonios tangibles de comunidades que ya se han beneficiado del Impacto Verificado FSC.

Al final, “Conservar para Impactar” dejó de ser un eslogan para convertirse en un movimiento en marcha. Lo que escuchamos, lo que vimos, lo que sentimos: bosques que devuelven vida, comunidades empoderadas y un futuro que nos llama a actuar.

El cambio que necesitamos puede ser urgente, pero ya ha comenzado.

Dia 3